Mitos en la piel: ¿protector solar todo el año o sólo en verano?

Hoy inauguramos una serie de columnas donde les estaré contando sobre algunos mitos o malas prácticas que rondan en el cuidado de nuestra piel, los que a la larga pueden traernos consecuencias indeseadas.  

¿Estás entre las personas que acabado el verano guarda el bloqueador solar hasta la próxima temporada? Si eres de ellas, te invitamos a cambiar tu rutina y acá te contamos porqué. 

La radiación solar afecta nuestra piel todo el año, no sólo los días soleados y sus efectos a largo plazo pueden originar flacidez, hiperpigmentación, deshidratación, hiperqueratosis (el engrosamiento de la capa externa de la piel), entre otros. Por eso es importante el uso constante de un protector UVA/UVB. 

Y no creas que si te quedas en casa puedes saltarte su uso, porque al igual que el sol, las pantallas de celulares, computadores u otros aparatos móviles también emiten una radiación, que se conoce como luz azul. La exposición prolongada a estos dispositivos, sin protección de por medio, produce un envejecimiento de las células cutáneas, lo que puede generar la aparición de manchas y arrugas en forma precoz. 

Así que ya sabes, el uso diario de protector solar es imprescindible para el cuidado correcto de tu piel. ¿Cuándo aplicarlo? Después de tu producto de hidratación SABIA (y antes del maquillaje, para les que se maquillan), siendo el último paso de tu rutina matutina de skin care. 

La cantidad adecuada para la piel del rostro son aproximadamente dos líneas extendidas en dos dedos. Por su parte, para el cuerpo, la cantidad necesaria es el equivalente a dos cucharadas (unos 30 ml) para toda la piel que se va a exponer al sol. 

Y tú, ¿conocías la importancia del uso del protector solar?